Tal vez acabas de hacer una revisión de marca o recientemente se ha actualizado tu oferta de productos y hayas considerado hacer un rediseño de tu sitio web. Sea cual fuere el motivo, un rediseño puede ser una gran solución, pero también puede convertirse en una tarea larga y tediosa, por lo que cada nueva idea debe comenzar con una visión clara de lo que quieres resolver o cambiar.
Dicho de otra manera: cuanto mejor definas esa visión desde el principio, más exitoso será tu rediseño y más fluido todo el proceso.
Ya sea que estés trabajando con una agencia, rediseñando tu sitio internamente o proponiendo un rediseño a quienes toman las decisiones de la empresa, esta guía tiene consejos para ayudarte a crear una estrategia para el rediseño de tu sitio web y asegurarte de que sea un gran éxito, no un fracaso. Por otro lado, si lo que deseas es comenzar desde cero tu sitio web, también podría interesarte este artículo sobre cómo hacer una página web exitosa.
¿Qué es el rediseño web?
El rediseño web es el proceso de refrescar o renovar total o parcialmente un sitio web, al hacer cambios y actualizar contenidos, estilos, la estructura, el formato y la navegación con el fin de mejorar su rendimiento y convertir a más visitantes.
Muchas organizaciones optan por rediseñar su sitio web para recibir más tráfico a medida que crece el negocio; otros invierten en el rediseño de un sitio web como parte de una iniciativa de cambios profundos en la marca. Independientemente de por qué tu empresa está interesada en un plan de rediseño de sitio web, el proyecto en sí es una tarea enorme; sin mencionar que es importante hacerlo bien, considerando el papel fundamental que desempeña el sitio web en tu marketing e imagen de marca.
De hecho, el 48 % de los usuarios piensan que el diseño de un sitio web es fundamental para inspirar confianza en la marca. Para muchos visitantes, el sitio web es tan importante como los productos que ofrece.
¿Con qué frecuencia debes rediseñar tu sitio web?
La vida útil promedio de un sitio web es de 2,6 años. Debido a que las tendencias de diseño cambian y la tecnología avanza, esta es la cantidad promedio de tiempo que un rediseño se sentirá «nuevo» y competitivo. Sin embargo, ese periodo es solo un punto de referencia, por lo que deberás determinar qué es lo más funcional para tu organización.
Los siguientes factores pueden determinar la frecuencia con la que debes rediseñar tu sitio web:
- Piensa con qué periodicidad cambia de objetivos tu marca. Cuando quieras un nuevo sitio, primero pregúntate: «¿Este sitio web todavía representa quiénes somos como empresa?»
- Cuál es el presupuesto que asignas al diseño y desarrollo. Pregúntate: «¿cuánto cuesta una página web? y si ¿puede esperar el diseño del sitio web o tengo razones para usar nuestro presupuesto en un rediseño o renovación?»
- Cuánto tiempo tu sitio web se mantiene funcional y a una buena velocidad. Ponte en el lugar de tus clientes y observa si puedes navegar adecuadamente por el sitio y encontrar todo lo que deseas sin enfrentarte a errores o largos tiempos de carga de la página. Casi el 50 % de los sitios web obtienen entre cuatro y seis páginas vistas por visita; esto significa que la navegación y la velocidad de tu sitio realmente importan.
- Rendimiento de tu sitio web. Pregúntate: «¿Este sitio está convirtiendo una cantidad razonable de tráfico? ¿Las personas permanecen en la página durante un tiempo razonable o rebotan?»
- Cambios en la industria. Por ejemplo, cuando Google anunció que cambiaría a la indexación móvil, necesitaba que los sitios web fueran aptos para dispositivos móviles o perderían tráfico orgánico de Google.
Tu sitio web es un lugar al que acuden los visitantes y clientes cuando quieren hacer preguntas, leer contenido o comprar productos o servicios. Por esa razón, es mejor estar más preparados cuando pienses en el rediseño de un sitio web.
Puedes pasar más tiempo construyendo el plan de rediseño de tu sitio web que en el rediseño en sí. Si te preguntas qué debes incluir en la estrategia de rediseño de tu sitio web, a continuación veremos ocho consejos fundamentales en los que debes pensar al planificar y completar tu rediseño.
¿Cómo rediseñar un sitio web?
- Compara tus métricas actuales de rendimiento.
- Determina los objetivos de rediseño de tu sitio web.
- Define tu marca y mensajes.
- Construye tus buyer personas.
- Refuerza el SEO de tus páginas.
- Analiza tu competencia.
- Realiza un inventario de tus activos de alto rendimiento.
- Elige el software adecuado.
1. Compara tus métricas actuales de rendimiento
Antes de comenzar a planificar el rediseño de tu sitio web, documenta tus métricas actuales de rendimiento. Esto te dará una buena idea de dónde se encuentra tu sitio web al momento y qué métricas puedes mejorar por medio de un rediseño.
Analiza el rendimiento mensual de tu sitio web existente en los siguientes aspectos. La importancia y relevancia de cada uno puede variar según los objetivos del rediseño de tu sitio web, pero es útil extraer cada métrica antes de sumergirte en esta tarea.
- Número de visitas, visitantes y visitantes únicos
- Porcentaje de rebote
- Tiempo en el sitio
- Palabras clave de mayor rendimiento en términos de clasificación, tráfico y generación de leads
- Número de dominios de enlaces entrantes
- Total de nuevos leads y envíos de formularios
- Ventas totales generadas
- Total de páginas indexadas
- Total de páginas que reciben tráfico
Si no tienes acceso a esta información, puedes usar herramientas como Google Analytics y Marketing Analytics de HubSpot para un mejor seguimiento y visibilidad del rendimiento de tu sitio web.
Ten presente las herramientas que utilizaste para medir cada uno de los puntos antes mencionados, ya que idealmente deberías usar esas mismas cuando recopiles las métricas posteriores al rediseño. De lo contrario, estarás comparando manzanas con naranjas.
2. Determina los objetivos de rediseño de tu sitio web
¿Cuál es el «porqué» detrás del rediseño de tu sitio web? Al considerar un rediseño, siempre debe haber una buena razón detrás.
Si estás respondiendo con «bueno, ha pasado un tiempo desde que hicimos uno» o «mi competidor acaba de hacer un rediseño», esas razones no son lo suficientemente buenas por sí solas.
Recuerda: no se trata solo de cómo se ve tu sitio, sino de cómo funciona. Debes ser muy claro acerca de por qué estás rediseñando un sitio web para que puedas vincular esos objetivos con resultados medibles. Luego, comunica los objetivos a tu equipo, diseñador o agencia.
Considera los siguientes objetivos basados en datos para tu propio sitio web:
- Aumentar el número de visitas y visitantes (ambos son importantes ya que un visitante puede acceder más de una vez)
- Reducir la tasa de rebote
- Aumentar el tiempo en el sitio
- Mejorar la autoridad de dominio
- Aumentar el total de nuevos leads y envíos de formularios
- Incrementar las ventas totales generadas
- Mejorar las clasificaciones SEO actuales por palabras clave importantes
Muchos de estos objetivos se vinculan unos con otros. Por ejemplo, para generar más conversiones, es posible que también debas aumentar el tráfico y disminuir la tasa de rebote de tu sitio.
Además, echa un vistazo a las métricas que obtuviste en el paso anterior. ¿Hay alguna métrica que puedas mejorar con tu nuevo sitio web? Tal vez también utilices las métricas de tu antiguo sitio web para inspirar nuevos objetivos.
3. Define tu marca y mensajes
Antes de crear el diseño y el contenido de tu nuevo sitio web, ten muy claro cuál es la marca, el mensaje y la propuesta de valor única. Si lo haces, garantizarás la coherencia en todo tu sitio web.
Cualquiera que visite tu sitio web por primera vez debe comprender de inmediato lo que haces, cómo puedes beneficiarlo y por qué debe permanecer en tu sitio y no irse con la competencia.
Toma nuestra página de inicio como ejemplo: queda claro de inmediato lo que hacemos, lo que ofrecemos y cómo cualquier visitante puede comenzar.
Piensa si planeas cambiar tu marca o los mensajes, o si permanecerán igual. Si optas por una transformación, ¿qué necesitas modificar? Mantén estos cambios en mente cuando rediseñes tu sitio web.
A medida que desarrolles tu mensaje, utiliza un lenguaje claro y conciso. Evita tecnicismos de la industria con la que podrías alejar a tu audiencia, pues podrías parecer más un robot que un ser humano.
Considera el siguiente ejemplo en el que describiremos HubSpot de una manera un tanto acartonada:
HubSpot ayuda a las empresas de varios países a reducir la rotación al completar el proceso de ventas con tráfico altamente calificado que genera leads que se convierten en clientes con un alto valor de por vida. Logramos esto proporcionando un software de vanguardia que integra todos los canales de marketing para una vista sinérgica de los datos que determina y prioriza las actividades de marketing de alto valor.
¿Qué, qué? Ahora traduzcamos eso a la forma en que la gente realmente habla y con la que se puede sentir identificada:
El software de marketing todo en uno de HubSpot ayuda a más de 100.000 empresas en más de 120 países a atraer leads y convertirlos en clientes. Pionero en inbound marketing, HubSpot tiene como objetivo ayudar a sus clientes a hacer marketing que la gente realmente ame.
¡Mucho más claro! ¿Verdad?
Además, a medida que desarrolles la identidad de marca de tu empresa, considera qué aspectos visuales de tu sitio web deben rediseñarse o mantenerse. ¿Has creado un nuevo logotipo, guía de estilo o paleta de colores? Asegúrate de que se apliquen a tu nuevo sitio web para que sea coherente con otros aspectos de tu marca.
Para obtener más inspiración, puedes ver estos ejemplos de diseño de sitios web fabulosos.
4. Construye tus buyer personas
Tu sitio web no se trata solamente de ti. En realidad, no se trata de ti. Cuando tus visitantes llegan a tu sitio web, se preguntan: «¿Qué hay para mí? ¿Cómo podría ayudarme esto?»
Habla con tus visitantes en su idioma elaborando el diseño y el contenido de tu sitio web en torno a tus buyer personas.
Por ejemplo, si eres un gerente de marketing de un hotel que busca atraer nuevos negocios, puedes dirigirte a cinco buyer personas diferentes: un viajero de negocios independiente, un gerente de viajes corporativos, un planificador de eventos, una familia de vacaciones y una pareja que planifica la recepción de su boda.
Asegúrate de identificar claramente a tus compradores para que puedas dar forma a la estrategia de rediseño de tu sitio web en torno a los visitantes que más te importan.
¿Estás cambiando tu público objetivo como parte del rediseño de tu sitio web? ¿Tu marca y contenido se alinean con esta audiencia? ¿El diseño está centrado en el usuario? Responde estas preguntas mientras elaboras la estrategia de rediseño de tu sitio web.
5. Refuerza el SEO de tus páginas
Aparecer en las búsquedas también es esencial para mejorar las métricas de tu sitio web. Si nadie puede encontrar y visitar tu sitio, ¿cómo puedes aumentar los nuevos leads, las conversiones o las ventas? Estos son algunos consejos para diseñar tu nuevo sitio web teniendo en cuenta una estrategia de optimización de motores de búsqueda (SEO):
Documenta tus páginas con mayor valor de búsqueda
Utiliza tu analítica de marketing para determinar qué páginas reciben la mayor cantidad de tráfico y enlaces entrantes, convertir la mayor cantidad de leads y, en última instancia, cubrir los temas más influyentes en tu industria. Si planeas mover cualquiera de estas páginas de gran valor, asegúrate de crear los redireccionamientos 301 adecuados.
Crea una estrategia de redirección 301
Respecto a los redireccionamientos 301, estos son extremadamente importantes en términos de retener el tráfico y el valor del enlace asociado con una página determinada. Crea una hoja de cálculo para registrar y mapear tus redireccionamientos 301 (URL antiguas frente a URL nuevas). Luego entrega este documento a algún técnico para que realice una implementación adecuada.
Haz una investigación de palabras clave
Para cada página de tu sitio web recién diseñado, elige una palabra clave/tema en el que se centrará cada página. Luego, usa las mejores prácticas de SEO para optimizar las páginas de tu sitio web. Además, considera agregar nuevo contenido y páginas a tu sitio web que aborden esas palabras clave y temas particulares que pueden estar desatendidos en su sitio actual.
6. Analiza tu competencia
Si bien no recomendamos obsesionarse con tus competidores, puede ser útil saber qué están haciendo. En primer lugar, ejecuta tu sitio web a través de la herramienta gratuita Website Grader de HubSpot para generar un reporte de calificaciones sobre el rendimiento de tu sitio web. También puedes usar esta herramienta de diagnóstico para evaluar los sitios web de tus competidores, de modo que estarás al tanto de tus fortalezas y debilidades.
A continuación, echa un vistazo a los sitios web de tus competidores y toma nota de lo que te gusta y de lo que no. Este proceso te ayuda a percibir lo que puedes hacer mejor en tu sitio web. Una vez que realices un análisis de tu competencia, elabora una lista de elementos que supongan algunas áreas de mejora y que logren diferenciarte de tus competidores.
7. Realiza un inventario de tus activos de alto rendimiento
Si bien un rediseño es una excelente manera de mejorar el rendimiento de tu sitio web, lamentablemente hay innumerables formas en las que puedes perjudicarlo. Es probable que tu sitio web existente contenga activos de alto rendimiento que ya has creado, y pudieran perder su efectividad debido a un rediseño que dañe gravemente tus resultados de marketing.
Estos activos pueden incluir aspectos como:
- Contenido más compartido o visto
- Páginas de alto tráfico
- Palabras clave de mejor rendimiento o clasificación y páginas asociadas
- Número de enlaces entrantes a páginas individuales
Por ejemplo, si eliminas una página de tu sitio que ha acumulado un gran número de enlaces entrantes, podrías perder una gran cantidad de autoridad SEO, lo que dificultará cada vez más que te encuentren en las páginas de resultados de los motores de búsqueda (SERP).
Ten presente que muchos diseñadores web no consideran este paso porque no son especialistas en marketing ni en SEO. No dudes en recordarles esto y ayúdales auditando tu sitio y brindándoles una lista para mantener o actualizar páginas críticas en tu sitio.
8. Elige el software adecuado
El paso final (pero posiblemente el más importante) del proceso de rediseño de un sitio web es elegir el software adecuado para crear y alojar tu sitio web. Este software generalmente se denomina sistema de administración de contenido (CMS) y se usa para desarrollar, diseñar y publicar tu sitio web para que el mundo lo vea.
El software CMS tiene varias ventajas. Tanto si eres un vendedor digital novato o un desarrollador web experto, un CMS puede ayudar fácilmente a crear un sitio web hermoso y funcional. La elección del CMS adecuado depende de tu negocio, como los CMS con los que ya estás familiarizado y las características que requiere el rediseño de tu sitio web.
Hay cientos de CMS para elegir, incluido el CMS gratuito de HubSpot, el único que combina CMS y CRM. También puedes revisar algunas de las mejores plataformas de CMS para conocer otras opciones.
Comienza hoy con el rediseño de tu sitio web
¡Uf! Ahora estás listo para planificar, diseñar, construir, optimizar, lanzar y analizar tu nuevo sitio web. Aplica estos siete pasos para rediseñar un sitio web que atraiga a más consumidores, sorprenda a más visitantes y convierta a más clientes.