El networking, también conocido como la capacidad de generar relaciones profesionales que puedan ser útiles en algún momento, es un elemento fundamental de muchas labores profesionales; sin embargo, resulta ser vital para todas aquellas personas que se dediquen a las ventas.
Dado que en la actualidad hemos pasado de una estructura laboral que prioriza la ejecución de tareas a un modelo de interacciones que busca generar conexiones clave, contar con una estrategia de networking se vuelve necesario en la vida de todo profesional; pero ¿cómo hacer para establecer y mantener relaciones profesionales en tu nicho de mercado, de manera que puedas sacarle el mejor provecho? En este artículo compartiremos contigo algunos consejos para que lo hagas.
Descubre a continuación cómo hacer networking efectivo a partir de los siguientes consejos. Después de constatar las ventajas de hacer buenos contactos de negocios, no pasarás un día más sin cuidar tus relaciones profesionales. ¡Comencemos!
¿Cómo hacer networking efectivo?
- Llega con un objetivo claro en mente.
- Ten algunos inicios de conversación relevantes e interesantes.
- Sé increíblemente amable.
- No tengas miedo y confía.
- Preséntate con alguien que sea mejor que tú en el área que te especializas.
- Piensa como periodista.
- Pregúntale a la gente sobre su vida.
- Fortalece tus contactos menos frecuentados.
- Realiza tu propuesta y expón los beneficios de asociarse contigo.
- Termina la conversación con elegancia y gracia.
1. Llega con un objetivo claro en mente
La siguiente vez que vayas a un evento pregúntate «¿A quién quiero conocer y por qué?». Algunas plataformas de registro para eventos, como Eventbrite, muestran la lista de invitados en la página de registro. Si esto es así, date un tiempo para revisarla. Observa si una persona o compañía en la lista es alguien con quien has querido generar una conexión. Si la respuesta es afirmativa, busca el perfil de los invitados que sean de tu interés en LinkedIn para aprender un poco más sobre ellos y puedas buscarlos y conversar en el evento.
Hay mucha gente increíble que puedes conocer en eventos que se convierten en caras familiares en otros acontecimientos de la misma industria. Identificarlos es bueno, pero si pasas más tiempo investigando de manera consciente sobre ellos y después tienes una buena conversación, seguramente lograrás convertir estas caras conocidas en contactos valiosos de tu red o network.
¿Quieres difundir un nuevo proyecto en el que estás trabajando? ¿Quieres conocer a un líder de tu industria que pueda convertirse en un mentor valioso? ¿Quieres encontrar empleados potenciales para posiciones vacantes en tu empresa? Para todas estas cosas, tener un objetivo claro en mente hará que el networking sea menos ambiguo y conduzca a conexiones más eficaces y provechosas.
2. Ten algunos inicios de conversación relevantes e interesantes
Acercarse a un grupo pequeño o grande de personas puede ser algo intimidante, pero si lo haces con la perspectiva adecuada puedes unirte a una conversación existente o comenzar una propia de manera exitosa. Aligera el ambiente de la velada presentándote con una persona que también está sola y busca a alguien con quien hablar.
Más allá del tiempo que pases en los eventos, lee sobre las noticias de la industria y de las últimas tendencias con el fin de que estés preparado para brillar en las conversaciones. Pregúntales a otros lo que piensan sobre temas en los que ambos estén interesados.
Este consejo también aplica para un networking online, por ejemplo, en LinkedIn. Si bien de esta forma es más complicado entablar una conversación, el consejo es: ¡atrévete! ¿De qué manera? Envía y acepta invitaciones de personas que no conozcas, interactúa con tu red de contactos felicitándolos por algún logro o aniversario y comenta sus publicaciones.
Tu primera conexión en un evento es la puerta que puede ayudarte a conocer a más gente. Tal vez esa persona viene acompañada de amigos que te puede presentar o quizá puedan animarse a irrumpir en grupos más grandes una vez que se conozcan un poco más. Quienquiera que sea tu primer contacto en un evento, inicia la conversación acerca de algún tema relevante para ambos. Esto te ayudará a aliviar un poco la rareza y el estrés de estar en una situación nueva, y tal vez después los conduzca a conocerse más.
3. Sé increíblemente amable
El cofundador de HubSpot y jefe del departamento de tecnología, Dharmesh Shah, tiene una expresión bastante certera y que deberíamos tener en mente: ser increíblemente amable.
Pensar así te ayudará a valorizar la manera en que ves a tu network o red de contactos. Si consideras ayudar a 10 personas en un mes, el número de gente con la que estarás en contacto se incrementará y también con ello el valor de tu oferta como algo útil y la calidad del vínculo que tengas con otros. De esta manera tu interacción sea más placentera durante los eventos.
Empieza con una lista que nombre a quienes puedes ayudar en tu red más cercana. Una vez que hayas puesto en práctica tus increíbles músculos de la amabilidad, lograrás mejorar tus habilidades de convivencia y conversación. Con el tiempo, verás que poner esto en práctica te dará grandes resultados en cuanto al número de contactos y la habilidad al conversar.
4. No tengas miedo y confía
En su libro ¿Por qué yo no?, Mindy Kaling sugiere que «hagas una lista de las personas que piensas que serían grandes mentores y que intentes acercarte a ellas para robar su señal de wifi».
Aunque su acercamiento es un poco irónico, la mayoría de gente a la que admiramos por su inteligencia, visión o ambición suele ser parte de un grupo al que nunca nos acercamos.
Si este es tu caso, te recomendamos revisar a Jia Jiang para inspirarte y cambiar. Con base en su experiencia de enfrentar el rechazo de primera mano, Jiang advierte que el miedo al rechazo conduce a la gente a decirse «no» a sí misma. No dejes que tu miedo al rechazo esté entre los obstáculos para construir una red de contactos amplia. En vez de eso, crea una lista ambiciosa con los nombres de la gente de la que quieres aprender e identifica maneras creativas para hacer que esto suceda.
5. Preséntate con alguien que sea mejor que tú en el área que te especializas
Un poco de la mano con el consejo anterior, puede ser que a veces asistas a eventos de networking con grandes expectativas como conocer al CEO de la compañía que admiras, al autor del libro que cambió tu enfoque profesional y la potenció, etc. Te emociona estar en el mismo lugar que esa persona y quieres acercarte a ella para conversar, pero cuando llega el momento y la observas a la distancia te ganan los nervios o la incomodidad.
¿Cómo podrías iniciar una conversación exitosa con esta celebridad de tu industria sin que note que estás muy nerviosa o nervioso?
Lo primero y más importante es que debes asegurarte de tener un propósito. No es muy productivo llegar a una conversación ajena para decirle a alguien que adoras su trabajo o que admiras la perspectiva que tiene de los negocios. Es muy posible que este tipo de intervenciones sean contestadas con un simple «gracias» y ahí termine la interacción. Considera qué elementos de esta persona resuenan contigo y cuáles características se ven reflejadas en tu trabajo, proyecto o filosofía laboral.
Acercarte con confianza y presentarte no como un fan sino como un igual (porque en realidad lo eres) y decirle algo reflexivo y provocador con lo que se pueda relacionar, como «tu aplicación del inbound marketing para proyectos sin fines de lucro me ayudó mucho en mi último trabajo, pero ahora estoy cambiándome a la industria farmacéutica. ¿Modificarías el acercamiento de inbound marketing si estuvieras en mi lugar?».
Recuerda que admiras a esta persona porque respetas su liderazgo en un área. Dale la oportunidad de admirar tu trabajo también al sacar temas interesantes y relevantes en la conversación.
6. Piensa como periodista
Si el consejo anterior te parece algo complejo de llevar a cabo, puedes aplicar esta estrategia. Aprenderás mucho más si aludes a las pasiones de las personas como una manera de empezar una conversación, que con una simple petición o pregunta sobre lo que hacen en su empresa o carrera. Con esto en mente, canaliza a tu periodista interior y formula preguntas que creas que harán salir las aficiones o temas que apasionan a tus interlocutores.
Preguntar sobre los temas por los que la gente se apasiona puede ser el mejor inicio de conversación, ya sea sobre algún asunto de cultura general, deporte o ramas que consideres de interés. Para aquellos contactos que conoces un poco más te puedes basar en lo que comparten en sus redes sociales. Seguir con esta actitud de reportero te ayudará a conocer mejor a las personas con las que buscar hacer crecer tu red de contactos.
Además, si complementas esta actitud con el uso de herramientas, como un lector de tarjetas de visita, que te ayude a tener un registro ordenado de tus contactos, verás que tu red crecerá de manera sorprendente.
7. Pregúntale a la gente sobre su vida
Muchas veces cuando conocemos a alguien e intercambiamos información como nombre, compañía, trabajo, cargo y el lugar en que nacimos, lo hacemos en tres minutos. Después sonreímos, miramos el piso y decimos algo como «Qué buen saco».
Cuando se acaba esta breve conversación, es fácil desviar la atención y perder la oportunidad de crear un nexo. Para evitar esto, hazlos el tema de conversación. Si hay un silencio incómodo, siempre puedes preguntar sobre los proyectos en que están trabajando y una vez que te los comenten puedes pedirles que te cuenten más respecto a ellos. No solo estarás mostrando interés en tu interlocutor y lo motivarás a seguir hablando, sino que también le generarás algo de intriga porque casi nadie está acostumbrado a pedir detalles sobre él o su trabajo.
Tal vez pienses: «¿Cómo voy a generar una conexión si solo hablamos de ellos todo el tiempo?». A decir verdad, mostrar interés genuino en la otra persona habla más del interés que tienes de crear una relación profesional de largo plazo, que solo hablar de ti y tus logros.
Además, si una persona no responde a este tipo de interacción o no continúa con la dinámica motivándote a que le cuentes sobre ti después de que mostraste interés en ella, tal vez no es una conexión valiosa después de todo. La siguiente vez que una conversación tenga altibajos, pídeles que te hablen más de ellos, de lo que les interesa o en lo que están trabajando. Encontrarás coincidencias con las que podrás generar una charla más amena y que te ayudarán a conocer mejor a tus interlocutores.
8. Fortalece tus contactos menos frecuentados
Una investigación de Mark Granovetter habla sobre el poder de las conexiones menos frecuentadas. Este estudio revela que una amplia mayoría de la gente obtuvo sus trabajos a través de una conexión con gente a la que rara vez suele ver (esto desde 1973). Aunque es cierto que las estrategias para conseguir trabajo han cambiado de manera significativa desde ese entonces, la importancia de los contactos pasivos no se ha modificado. Sería raro pensar que tu mejor amigo te refirió para tu próximo trabajo y es mucho más posible que un viejo compañero de clases, un vecino o un amigo de un amigo tuyo sí te hayan recomendado laboralmente.
Debido a esto, una manera de hacer que los eventos de networking sean experiencias menos incómodas consiste en ponerte al día con ciertos contactos que no sueles ver. Si tienes acceso a una lista de invitados y encuentras nombres conocidos, pero recuerdas que no tienes una relación muy cercana, ese evento puede ser la oportunidad perfecta para tener una conversación casual con ellos.
Pregúntales sobre lo último que hayan leído que los impactó o una conferencia que les haya interesado. Al hacer esto estarás generando una conversación amistosa, y un poco halagadora, que les hará saber que todavía los recuerdas y que siguen siendo parte de tus contactos, aunque no hables mucho con ellos.
9. Realiza tu propuesta y expón los beneficios de asociarse contigo
Quizá alrededor de los eventos de networking tengas la fantasía de que conocerás a un contacto que impulsará tu negocio o carrera profesional. No sabes bien quién será, pero piensas que será una persona que te hará una oferta de trabajo increíble, que encontrarás a un gran inversor, que lograrás conseguir una recomendación que hará la diferencia o que un cliente potencial por fin se decidirá por tu empresa.
Sea cual fuere, esa fantasía no va a realizarse por arte de magia. Puedes jugar con las cartas adecuadas para dejar el escenario listo para el gran momento. Pero llegará el punto en el que tendrás que arriesgarte a salir y expresar de manera clara y firme lo que quieres. ¿Cómo puedes hacer eso sin sonar agresivo?
La mejor manera de encontrar el tono adecuado es que recuerdes la pregunta clásica de las entrevistas de trabajo: «¿Por qué deberíamos elegirte a ti y no a otro candidato?». Tienes que encontrar una respuesta verdadera, humilde y ejemplar que demuestre por qué eres la persona adecuada para el trabajo. La perspectiva que tomes para obtener lo que quieres del proceso de mantenimiento y crecimiento de tu red de contactos no debe ser diferente. Pese a ello, cuando expreses tus necesidades o deseos manifiesta también tu flexibilidad.
10. Termina la conversación con elegancia y gracia
Es importante recordar que el networking no es como hacer «speed dating». El objetivo no es conocer al mayor número de personas que puedas: es establecer conexiones valiosas. Por eso es mejor que no apresures las conversaciones; simplemente, aprende a detectar las ocasiones en que debes abandonar la charla. Tienes que ser amable para terminar cualquier conversación, ya sea que estés hablando con alguien que no te deja decir ni una sola palabra o alguien que solo habla sobre los malos tratos que recibe de su jefe directo.
Si te encuentras con una pausa en la plática puedes decir: «Por favor, déjame saber cómo va ese proyecto pronto. Me encantaría saber cómo avanza». Esto mostrará que estás interesado y aunque terminas la conversación no harás que la persona se sienta ofendida. Una alternativa también es preguntarle: «¿Has visto a alguien de (nombre de la compañía) hoy? Tenía un asunto que hablar con él».
Esto expresará de forma amable que es importante para ti expandir tu red de contactos, aun si necesitas terminar la charla. Si alguna vez necesitas salir de una charla tortuosa, termina la discusión en ese momento, pero con una sensación de mantener el final abierto y con la disposición para seguir hablando en el futuro.
A veces conocemos a personas en eventos que llaman nuestra atención aunque no tenemos ningún proyecto, amigos en común o eventos próximos que nos unan a ellas. Claro, nunca sabes de quién podrías necesitar consejo o guía en un futuro.
Por ejemplo, quizá alguna vez conozcas al CEO de una pequeña firma de videomarketing en un evento. Aunque en el momento no hagas ningún trabajo que se relacione con el video, puede ser que detectes una conexión verdadera y profunda.
Si te menciona que su hijo acaba de ingresar en la misma universidad en la que tú estudiaste, puedes hacer un seguimiento en LinkedIn y recordarle lo agradable que fue conocerlo y ofrecerle tu ayuda en caso de que su hijo tenga alguna pregunta para la universidad. Poco después, tal vez hable de manera amena con tu jefe y esto ayude a tu reputación profesional y a mejorar el ambiente en tu trabajo. En última instancia, darle seguimiento a las conexiones personales te ayuda a diferenciarte y reforzar tus lazos.
¿Planeas atender un evento de networking para ampliar tu red de contactos? Deja la incomodidad en la puerta y camina con confianza. Recuerda que el balance final de la velada depende de ti. Para más consejos, revisa cómo hacer mensajes efectivos en LinkedIn.