1) Funcionalidad
La funcionalidad de una página web consiste en la función general que cumple una página en Internet. A menudo trata de una serie de aspectos que el usuario no percibe.
Añadir funcionalidad a una página web consiste en determinar qué tipo de arquitectura web se utilizará para construir el sitio, el tipo de servidor en el cual la página web se encontrará alojado y las características que se incluirán para mejorar la experiencia general de usuario.
El trabajo de una agencia de diseño web es desarrollar una lista de funciones que serán integradas a una página web. Si bien muchas de ellas requieran funciones mínimas, es posible que las páginas grandes requieran múltiples funciones. Lo adecuado es que exista una comunicación entre el cliente y el diseñador para que este último tenga una mejor comprensión de lo que el cliente espera de su página web.
2) Forma
La forma de una página web consiste en la visión general de la página y la forma en que se presenta el contenido. Es lo que el usuario observa al cargar una página web.
Lo clave es determinar qué tipo de contenido se quiere presentar y cuál es el objetivo que este cumple. Una vez que esto se haya decidido se debe definir qué forma tendrá la página para presentar este contenido.
Una página web debe ser atractiva a la vista, y a su vez proporcionar un aspecto y un mensaje coherente. A esto se le conoce como tema. El diseño de un tema tiene como objetivo aprovechar al máximo las funciones para la cual fue diseñado. Ya sea que se elija páginas HTML estáticas o un software PHP accionado de forma dinámica, la página web debe ser coherente en el diseño y en el propósito.
El objetivo de una página web debe ser muy claro, por lo tanto contar con un buen contenido es fundamental para que un negocio proporcione la mejor información a sus clientes.
3) Compatibilidad
La compatibilidad de una página web consiste en lo sencillo que puede ser para el usuario navegar por el sitio, que los motores de búsqueda lo indexen y que sea fácil de encontrar en internet. De lo contrario, cuál sería el objetivo de tener una página web si no cumple con ninguno de estos aspectos.
Una página no ofrece una buena experiencia de usuario se convierte de inmediato en un fracaso. En toda agencia de diseño es común poner a prueba una web antes de su publicación para verificar que todo funcione de forma adecuada. A este proceso podría conocerse como el “control de calidad” del diseño web. De igual modo una página web debe ser de fácil navegación para los motores de búsqueda, Esto permite una óptima indexación a los principales buscadores. Por lo que las agencias de diseño web deben proporcionar un diseño compatible a un motor de búsqueda.