Lo primero que debemos entender es que el email marketing no funciona enviando correos electrónicos a extraños. Al comprar o rentar bases de datos, lo único de lo que puedes estar seguro, es generarás molestias y estarás violando la Ley de Protección de Datos Personales. El correo electrónico te ayudara a educar e informar a tus clientes potenciales, a diferenciar tu negocio de la competencia, e invitarlos a tomar una acción especifica.
Además de ser una excelente herramienta para incrementar las ventas, también es una de las herramientas más efectivas para incrementar la lealtad y recomendaciones de tus clientes. Enviar correos de agradecimiento, felicitaciones y ofrecer beneficios especiales, ayuda a que tus clientes se sientan apreciados.
Seleccionar la tecnología y/o proveedor de marketing adecuado es importante, pero construir una base de datos propia y bien segmentada determina el éxito o fracaso de tu campaña de email marketing.
¿Cómo construir mi base de datos? El primer paso para construir tu propia base de datos, es entender los niveles de permisos.
- Autorización implícita: Este es el nivel básico. Por ejemplo, cuando alguien te entrega su tarjeta de presentación y te solicita que le envíes información de tu negocio. En estos casos debes tener cuidado sobre el contenido y frecuencia con la que le envías los correos electrónicos. Siempre es importante incluir un vínculo para que fácilmente pueda darse de baja.
- Autorización explícita: Este es el estándar en la industria. Por ejemplo, cuando rellenan un formulario en tu sitio web o redes sociales solicitando recibir información y promociones de tu negocio.
- Autorización doble opt-in: Cuando posterior a que llena un formulario de autorización explicita, envías un correo electrónico pidiendo nuevamente al suscriptor que confirme su decisión de unirse a la lista. Con este tipo de autorización estarás seguro de tener una base de datos confiable y que tus suscriptores están interesados en recibir tus emails. De esta forma, mejorarán las tasas de recepción y apertura de tus correos y en consecuencia tendrás mayores posibilidades de éxito.
Una vez que tienes claro los diferentes niveles de autorización es momento de establecer la estrategia para construir tu base de datos. A continuación algunas ideas:
1) Formulario web
Incluye un formulario o vínculo de inscripción en tu sitio web. Este enlace inclúyelo en todas partes, no solo en la página principal. Nunca sabes en qué página entrarán y saldrán tus prospectos.
2) Interacciones Personales
Aprovecha toda interacción con tus clientes y prospectos. Cuando alguien llama a tu negocio para pedir información, cuando asistes a un evento, o cuando visitas a un cliente. Simplemente pregúntale si quisiera unirse a tu lista de correos electrónicos. Recuerda siempre compartirle los beneficios de hacerlo.
3) Formatos Impresos
Incluye en tus volantes, catálogos, lonas, una forma de unirse a tu lista de correo electrónico. Incluye un código QR o un url personalizado. Recuerda que ese formulario sea compatible con los dispositivos móviles.
4) Redes Sociales
Comparte el vínculo al formulario de inscripción a través de tus perfiles sociales. Algunas plataformas sociales como Facebook, cuentan con plug-in que te permiten incrustar el formulario directamente en la pagina de tu negocio. Recuerda complementar la dirección de correo electrónico con otra información. Quizás incluir el nombre para personalizar tu mensaje, solicitar la ciudad o sexo de la persona te ayudará a una mayor segmentación de tus campañas.
Obtener información no siempre es fácil, pero la gente está dispuesta a compartir su correo electrónico y otra información si recibe algo de valor a cambio. Por ejemplo, ofrecer una asesoría gratuita, un cupón de descuento, descargar un reporte o acceso a un evento especial. Recuerda que para obtener mejores resultados, debes ofrecer incentivos relacionados con tus productos o servicios. Probablemente si rifas una televisión o iPad, todos querrán participar, pero si tu objetivo es vender, enfócate en prospectos precalificados.