La principal pregunta que las empresas se hacen a la hora de armar una estrategia digital es si deben centrar sus esfuerzos en generar tráfico a partir de una campaña de PPC (Pago por Click), o, por el contrario, generar activos de calidad que permitan captar tráfico cualificado sin la necesidad de recurrir a una campaña de pago.
En ocasiones, las empresas que buscan crecer en Internet piensan que la única forma de captar tráfico segmentado es a través de una campaña de PPC. Estas campañas tienen una característica que hay que tener en mente: bien optimizadas, permiten captar muchos clientes potenciales a corto plazo, pero en el momento que dejas de invertir, el flujo de clientes se cortará de raíz.
Una buena estrategia digital global debe apoyarse en las campañas de PPC, sobre todo si tu negocio tiene una fuerte estacionalidad, como por ejemplo las empresas relacionadas con el sector textil, pero también debe basarse en estrategias que puedan captar una demanda de tráfico cualificada, sin tener que recurrir a una campaña de pago.
El Inbound Marketing es la respuesta a la necesidad de generar tráfico cualificado sin recurrir al PPC
En primer lugar, quiero recalcar que el PPC sí debe tener cabida en una estrategia de Inbound Marketing. La publicidad en los motores de búsqueda puede (y debe) integrarse dentro del Inbound, pero jamás puede tener el mismo peso que el marketing automation, la creación de contenido de valor, la viralización en redes sociales, el lead scoring o el cultivo de oportunidades de negocio.
Muchas empresas se obsesionan con la falta de tráfico, y por lo general, este no es el principal problema de un sitio web que no consigue ventas. Indicadores como una experiencia de usuario deficiente y la usabilidad cobran especial relevancia a la hora de analizar la conversión de una tienda online.
Partiendo de la base que tu contenido aporta valor a tus buyer persona, éste debe estar optimizado para los motores de búsqueda (es decir para Google). La penetración de Google es superior al 90%, por lo que es una barbaridad publicar contenido de valor, sin que esté optimizado para este buscador.
Para optimizar tu contenido para Google debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
1) La elección de la palabra clave es fundamental
Un buen estudio de keywords (realista) te ayudará a posicionarte por encima de tu competencia. Ten en cuenta tu tamaño, y las posibilidades que tienes. Por ejemplo, está claro que si tenemos una empresa local de compra-venta de coches de segunda mano, a todos nos gustaría salir en primera posición por “comprar coche”, pero igual es mejor apostar por palabras clave long tail, con menos búsquedas, pero también con menos competencia: “Comprar coches de segunda mano en Valencia”. ¿Quieres aprender cómo hacer el keyword research perfecto?
2) La palabra clave elegida debe estar insertada de forma natural en todo el artículo
Debe aparecer en el título, en el primer párrafo, en el title, en la metadescription, en la etiqueta H2, en el ALT de las imágenes, y en la URL.
3) Diseña e implementa un embudo de conversión
Si no haces esto, por mucho tráfico que captes a través de tus campañas de PPC, tu tasa de conversión jamás va a aumentar
¿Satisfaces las necesidades del cliente o solo te dedicas a intentar vender cueste lo que cueste? El consumidor en Internet se ha vuelto muy exigente. Las técnicas de la vieja usanza, tales como el bombardeo de llamadas ya no funciona (ojala lea esto algún comercial de las empresas de telefonía y dejen de llamarme para ver si me quiero cambiar de operador en plena siesta).
Es básico: si no eres capaz de satisfacer las necesidades de tu buyer persona, tus ventas jamás van a aumentar.