Las infografías ganan terreno en las redes sociales y en los sitios web de empresas y marcas personales.
Aquí conocerás cuáles son sus elementos y sus ventajas, además de algunos consejos para desarrollarlas con eficacia.
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Definición de infografía
Una infografía es una serie de ideas representadas de manera visual o gráfica. En otras palabras, es un híbrido entre la imagen y el concepto de un tema específico. Es muy fácil de comprender a simple vista por parte de un público amplio, gracias a su formato visual, sencillo y colorido. Además es una herramienta de comunicación muy efectiva y que tiende a hacerse viral.
Existen muchos tipos de infografías. Sin embargo, pronto comprobarás que todas comparten algunos elementos, especialmente las que mejor recepción tienen en el público. Observa el caso de Pictoline, que realiza publicaciones diarias que se comparten fácilmente, son interesantes, informativas y muestran una identidad de marca jovial y centrada en el usuario.
Imagen de Pictoline
Para comprender lo que hace exitosa a una infografía, hay que desmenuzar sus elementos esenciales. A continuación usaremos varios ejemplos reales para analizarlas y entenderlas a profundidad.
Los 10 elementos de una infografía extraordinaria
- Título
- Texto
- Gráficos
- Fuentes
- Créditos o marca
- Disposición de la información
- Legibilidad
- Coherencia
- Concreción textual
- Unidad
Iniciaremos analizando los primeros 5 puntos utilizando como ejemplo esta infografía sobre los gatos:
Imagen de El Tiempo
1. Título
Como en cualquier pieza de comunicación, el título atrae al lector o el espectador. Tiene que ser breve y conciso, y debe dejar claro cuál es el tema que se aborda.
Ya que su intención era crear un contenido que se sume a la conversación sobre el Día Internacional del Gato, el diario El Tiempo tituló así su infografía. Es buena idea tener en cuenta los temas que dominan las redes sociales para que tu pieza se relacione con ellos y sea más probable que las personas la vean y compartan.
2. Texto
Este elemento tiene como propósito explicar al lector aquello que las imágenes no pueden comunicar. No es un resumen, sino un elemento vital en la composición de una buena infografía. Puede parecer irrelevante, pero su utilidad está justificada plenamente, pues ofrece la oportunidad de utilizar un lenguaje dirigido a cierto público.
En el caso de esta infografía, la mayor parte del texto está ubicada en el centro y se utiliza para explicar varios aspectos que no pueden traducirse en imágenes o no pueden simplificarse aún más. El fondo hace más sencilla su lectura.
3. Gráficos
El cuerpo de la infografía está integrado por las imágenes, y más que «cuerpo» podríamos llamarle «alma». Puede tratarse de una serie de iconos, fotografías, ilustraciones, logotipos, mapas, diagramas y otros.
Los gráficos aportan estructura a la infografía, a través de ellos se identifican los subtemas o partes que integran la información como un todo. Ayudan, incluso, a dirigir la atención a un aspecto que interesa en particular, en este caso: los cuidados, los alimentos que no deben ingerir los gatos y otras recomendaciones pertinentes.
El uso de distintos bloques de color, subtítulos y la disposición de los textos, apoya a los gráficos para dirigir la vista y facilitar la comprensión del tema.
4. Fuentes
Una buena infografía debe apoyarse en fuentes verificables; primero, porque es importante dar información veraz a la audiencia, segundo porque es necesario otorgar crédito a los trabajos e investigaciones de donde fue extraído el contenido; y tercero, para evitar problemas legales como acusaciones de plagio.
Esto también le da cierta autoridad a la información y, por lo tanto, la hace más confiable y susceptible a que las personas la compartan o la citen para en sus propias redes sociales. Este tipo de práctica le dice a tu audiencia que tus contenidos se realizan cuidadosamente y que es buena idea seguirte.
5. Créditos o marca
Generalmente las empresas marcas o instituciones colocan su logotipo en la parte superior de la infografía para establecer que es una creación que les pertenece. Si en tu empresa hay un equipo dedicado por completo a la creación de estos dispositivos de comunicación, entonces se recomienda dar el crédito correspondiente a la labor que realizó cada persona, en cada etapa: investigación, redacción y diseño.
En este caso, el crédito es para la publicación y se consigna con su logotipo. Lo cual ayuda a la identificación de la marca. Si el responsable de la pieza, sea una empresa o una persona, cuenta con una reputación gracias a su propuesta de valor (ingenio en la presentación de la información, creatividad en los diseños o su veracidad) las personas buscarán sus contenidos con frecuencia, por ello siempre vale la pena incluir un elemento que le dé reconocimiento.
A continuación, abordaremos los siguientes puntos utilizando como ejemplo 5 infografías distintas:
6. Disposición de la información
En una buena infografía se juega con el espacio y las formas. Aunque los hispanohablantes acostumbramos leer de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo, un mensaje en forma circular, diagonal, ascendente o descendente puede ser interesante porque le aporta movimiento a la información.
Imagen de European Parliamentary Research Service
Este ejemplo, que trata sobre la economía circular, da una experiencia de lectura dinámica: aprovecha el concepto de «círculo» para organizar la información en torno a él, con lo cual el lector avanza de un punto a otro con fluidez. Es mas fácil comprender cómo funciona el proceso que describe y, por lo tanto, será más simple recordarlo después.
7. Legibilidad
Piensa en el público objetivo y en la economía del lenguaje. Después de todo, una infografía debe ser una mezcla eficiente entre texto y gráficos. Recuerda que la información se puede representar utilizando tablas, estadísticas, mapas conceptuales, e incluso emojis o caricaturas. En última instancia, la selección de estos elementos depende de a quién va dirigida la infografía.
Imagen de Statista
La forma en que se resuelve esta infografía es bastante simple y eficiente. Refleja las ventas de coches eléctricos en Europa durante 2019. Los datos se pueden interpretar gracias a un mapa, los colores y la simbología que indica los porcentajes. Cualquiera que desee consultar en dónde se ubica el mayor porcentaje de ventas, no perderá el camino hacia la información.
8. Coherencia
No se trata de hacer una mezcolanza de elementos por el simple deseo de impactar al público. Una infografía es, por definición, un artefacto comunicativo eficiente. La coherencia entre cada elemento (el título, la organización, la selección de imágenes, los colores, las formas, las típografías, etc.) resulta de suma importancia. Elige con cuidado.
El periódico mexicano La Voz de Michoacán tiene una cuenta en Pinterest con un tablero especial para las infografías que publica en sus páginas impresas. En este ejemplo sobre la historia del automóvil nos muestran cómo mantener coherencia entre el contenido, las imágenes y la forma en que se organiza la información. Además, es lúdica y creativa: semeja el tablero de un juego de mesa, en el que los participantes avanzan, casilla por casilla, sobre una pista de carreras, de la misma manera que la evolución del auto.
9. Concreción textual
Si puedes mostrar algo con una imagen, el texto sobra. Y, de manera inversa, si el texto es más eficaz para explicar una idea que requeriría gráficos muy complicados, entonces asegúrate de decir las cosas de manera concreta. Sin embargo, en muchas ocasiones texto e imagen coexisten y se complementan.
Imagen de Esmeralda Garibay
Esta infografía es un claro ejemplo de cómo las imágenes aportan diseño y color, mientras que el texto añade información. Cuando observas la infografía terminada, parece bastante sencilla; lo cierto es que llegar a esa concreción textual requiere una buena asimilación de los datos, para que lo visual sea lo que tenga mayor preponderancia.
10. Unidad
Uno de los aspectos más imprescindibles es la unidad. Recuerda que la pieza tiene que funcionar como un todo, de manera armoniosa. Cada elemento debe ser comprensible de manera aislada, y a la vez, debe aportar unidad al producto final.
Imagen de Ministerio de Energía del Gobierno de Chile
En esta pieza es evidente que la cohesión entre todos los elementos (tipografías, imágenes, cifras) hace sencillo identificar los transportes que más contaminan. Además, se reconoce de inmediato quién elaboró este contenido sin que reste protagonismo a lo que se desea comunicar; por el contrario, al tratarse de una fuente oficial, la infografía resulta auténtica y fidedigna.
Ya que sabes todo esto, seguramente una pregunta que ronda tu cabeza.
¿Cuál es la importancia de las infografías en marketing?
Con respecto al marketing, podemos agregar mucho más. En primera instancia, una infografía sirve para mejorar tu estrategia de contenidos. Cuando está bien diseñada, esta herramienta simplifica la información. Además, por su composición gráfica-textual, tiene el potencial de volverse viral en las redes sociales y propagarse en una variedad de medios.
Si piensas en la cantidad de información que circula diariamente en los dispositivos electrónicos y la comparas con aquella que disponían nuestros abuelos en los diarios y en los libros, hay una diferencia abismal. En la actualidad, la gente ya no se detiene a leer un articulo completo, una investigación o una crónica: seamos honestos, vivimos demasiado deprisa y la relevancia de la información cambia minuto a minuto.
Por esta razón, las infografías son perfectas para atraer e informar a los leads (pueden leerse e interpretarse en un instante muy breve). ¿Lo mejor de todo? No necesitas ser un experto para crearlas, pues con diferentes herramientas puedes crear infografías atractivas sin Photoshop.
Si esto fuera poco, cada infografía sirve para reflejar la voz y valores de tu marca e, incluso, realizar llamadas a la acción o dirigir a los lectores a otros sitios web o fuentes.
¿Cuáles son las ventajas de usar infografías?
Los beneficios que aportan las infografías dependen de su intención. En términos generales, podemos decirte que pueden destinarse a informar al público sobre las bondades de un producto o servicio, las diferencias entre tu empresa y la competencia (en términos de calidad, precio, envíos sustentabilidad, responsabilidad social) o cualquier cosa que quieras comunicarle a tu audiencia.
- Amenizan la lectura: los contenidos de valor se posicionan mejor cuando tienen elementos variados.
- Permanecen en la memoria: en promedio, las personas recuerdan mejor una imagen que un párrafo.
- Sintetizan la información: ayudan a que el público comprenda un tema fácilmente.
- Viralizan el contenido: las redes sociales son su mejor aliado, pues una infografía que se comparte implica más accesos a tu sitio web.
- Generan tráfico: más visitas al sitio web se traducen en más compradores.
- Refuerzan la identidad de la marca: ayudan a verla como un referente y a distinguirse de otras marcas.
- Suman atractivo a los sitios web: las infografías ayudan a diversificar tus publicaciones.
Consejos básicos para crear una infografía
Hacer una infografía desde cero puede resultar retador; sin embargo, a continuación te mostraremos algunos consejos para que tu siguiente infografía quede impecable:
1. Investiga en detalle
Es el primer paso, y el más importante, porque de él depende la calidad de la información. Te recomendamos que designes a un equipo o, por lo menos, una persona para esta tarea. Los curadores de información deben responder algunas preguntas fundamentales:
- ¿A quién se dirige el mensaje?
- ¿Qué pregunta responde la infografía?
- ¿Qué aspecto de la información recopilada es el más interesante?
Por último, organiza la información para darle el tratamiento adecuado.
2. Cuenta una pequeña historia
No todas las infografías pueden o deben ser lineales. Cuando hayas organizado la información de manera lógica, trata de imaginar un punto climático a partir del cual sería interesante comenzar, no necesariamente por el principio. Por ejemplo, imagina que tu infografía parte de los efectos y no las causas. Una estructura circular también funciona: comienza por la conclusión, desarrolla el tema y haz un remate que apele a las emociones del lector.
Cuando tengas la estructura de tu infografía, verifica que en cada sección haya contenido de valor. Repasa el cuestionario que respondiste en la primera etapa y valora lo siguiente: ¿es interesante el tema y el tratamiento que le has dado a la información?, ¿realmente el público leerá, compartirá y recordará tu infografía? En este punto puedes hacer los ajustes necesarios en el esquema o borrador, antes de continuar con el diseño.
3. Diseña con estilo propio
Encárgate de informar al equipo de diseño sobre los pormenores de la infografía, antes de que comience a trabajar (puede ser a través de un briefing u orden de trabajo que explique a quién se dirige, qué temas toca y cuál es el impacto se pretende generar con ella).
A continuación, define el estilo. Recuerda que, por tratarse de una infografía de marketing, debe ir acorde con la identidad de marca. En buena medida estos aspectos determinarán los elementos visuales, como la paleta de colores y el tipo de líneas, gráficos, ilustraciones y demás.
En este momento el equipo de diseño decidirá si realizará una infografía estática (imagen fija), dinámica (con movimiento mediante un gif) o interactiva (responsiva o compuesta de varias pantallas). Recuerda que, sin importar de qué tipo sea, hay dos aspectos fundamentales que debe cumplir el diseño: presentar adecuadamente la información y emocionar al lector.
Aunque la identidad de marca determina la apariencia del producto final, puedes jugar con referentes culturales que estén de moda. Una infografía vale tanto como la impresión que genera y de ello depende que se vuelva viral. Utiliza colores atractivos, imágenes emotivas y, si no cuentas con un equipo diseñadores, no te preocupes, hay muchas bibliotecas con imágenes y diseños gratuitos como: Unsplash, Death To Stock y New Old Stock.
Recuerda que debes ser consistente en el estilo con que elaboras cada infografía a partir de este momento. No pienses en ellas de manera aislada, sino como parte de una oferta de contenido de valor que debe reflejar en su totalidad las características de los productos o servicios de tu empresa.
Llegamos al final de esta guía sobre infografías. Esperamos que la información sea de valor para ti y para tu negocio. Como pudiste ver, las infografías se han vuelto bastante populares dentro de las estrategias de marketing; ¡inclusive puedes crear la tuya utilizando Word!
Recuerda que los seres humanos somos más propensos a observar y comprender por medio de una representación gráfica. Una infografía bien hecha tiene la capacidad de mejorar el mensaje que contiene y conectar con el público. Si estás buscando más inspiración antes de crear tu infografía, te recomendamos que eches un vistazo a estos ejemplos geniales de infografías.