Habilidades blandas o soft skills: qué son, tipos y ejemplos

Con seguridad, en más de una oferta laboral has encontrado el término soft skills. Este término se refiere a las habilidades blandas que cada persona tiene al desenvolverse con otros individuos y con una empresa en general. 

En el desarrollo profesional se consideran muchas habilidades y cualidades para decidir quién es la persona indicada para asumir un rol dentro de una organización. Las habilidades blandas permiten conocer la forma en que alguien podría desempeñarse de manera no técnica.

Si no estás muy seguro de qué son las habilidades blandas, aquí te cuento lo más importante sobre ellas y comparto contigo algunos ejemplos para que tengas una idea más completa de cómo implementarlas.

Las habilidades blandas también son conocidas como habilidades interpersonales, esenciales o no cognitivas. Estas aptitudes son también parte fundamental del desarrollo interpersonal en todas las esferas de la vida de un individuo y se atribuyen a la personalidad natural de una persona y a la capacidad de adaptación que ha ido formando con el tiempo.

Además, son las cualidades que ayudan a las personas a relacionarse eficazmente con su trabajo, con sus compañeros y hasta con los mismos clientes. De ahí que sean tan importantes en el desarrollo profesional y que formen parte de los requisitos para desempeñar con éxito un puesto de trabajo.

Diferencia entre las habilidades blandas y duras 

Si bien las habilidades blandas y duras se van adquiriendo con el paso del tiempo y la experiencia, y ambas representan el talento que un individuo aporta a la empresa, existen diferencias que hacen que estas cualidades resalten de forma individual. Por ello, hay empresas que, según sus objetivos, pueden buscar más de una que de otra.

Las habilidades blandas, como ya lo mencioné, son todas aquellas cualidades interpersonales que describen la forma en que trabajas e interactúas con los demás. Por su parte, las habilidades duras son las competencias tradicionales y cuantificables que has aprendido con el tiempo y que hacen que seas un experto en ciertas actividades o trabajos. 

En tanto que las habilidades blandas dependen de tu personalidad y tus atributos naturales, las habilidades duras están subordinadas al puesto en el que te desarrollas y el tipo de trabajo que llevas a cabo a diario. Por ejemplo, algunas habilidades duras específicas pueden ser:

• El desarrollo de briefs creativos
• El manejo experto del lenguaje de programación
• El dominio de varios idiomas
• El uso de software de diseño gráfico

En resumen, la naturaleza de tu trabajo es la responsable de las habilidades duras que desarrollas con el tiempo.

Importancia de las habilidades blandas

Tanto en la vida cotidiana como en la vida laboral, no importa cuántos conocimientos técnicos o experiencia tengamos en un campo particular, esos saberes requieren de ciertas habilidades prácticas para aterrizarlos en la solución de problemas. Y esa es la principal tarea de las habilidades blandas. 

Estas habilidades permiten que las personas que las poseen ejecuten de forma exitosa actividades específicas, pero también determinan la capacidad que tenemos para hacer que tengan valor para las organizaciones. De esto se desprende que cultivar nuestras habilidades blandas es importante por los siguientes aspectos:

• Permiten responder a las necesidades de un medio. Auxilian en la resolución de problemas prácticos y fortalecen nuestras aptitudes para ofrecer un buen desempeño en las funciones que nos correspondan. 
• Fomentan la especialización. Debido a que estas habilidades se dan de forma natural, perfeccionarlas ayuda a que seamos las personas más capacitadas para ejecutar ciertas acciones y resolver problemas concretos. 
• Mejoran la capacidad de trabajo en equipo, pues al reconocer nuestras habilidades podemos también ser conscientes de aquellas que tenemos menos desarrolladas. Esto incita a la colaboración y el apoyo mutuo.
• Son parte esencial de las relaciones humanas, lo que puede ser un gran diferenciador a la hora de ofrecer servicios o productos. Ten en mente que los consumidores quieren hablar con personas sensibles y no con máquinas. 

Por otro lado, estas habilidades sirven como parámetro para pronosticar si un candidato tendrá éxito en el rol que desempeñe. Quizá para algunos puestos sea más relevante tener capacidades creativas que conocimientos de ofimática; mientras que para otros sea esencial tener una buena comunicación, aunque no se tenga experiencia en producción. 

Por ejemplo, cuando una empresa requiere un profesional que brinde soporte a los clientes, es ideal que estos empleados cuenten con habilidades blandas que les permitan dar un trato amable y servicial. Es posible que haya un experto en resolver problemas a nivel técnico, pero si su relación no es cortés, podría generar una discordancia entre los valores y compromisos de la empresa y los clientes.

Tipos de habilidades blandas

Como hemos visto, las habilidades blandas son aptitudes que poseemos para la resolución de problemas y que definen la personalidad y capacidades de cada uno de nosotros. Esto quiere decir que no todos contamos con las mismas soft skills, pero también que cada una de ellas sirve para diferentes cosas. 

Una forma de categorizar a estas habilidades es tomando en cuenta su función. Veamos cuáles son estas y cómo pueden incidir en el plano laboral de las personas. 

Interpersonales

Con estas habilidades hago referencia a todas aquellas aptitudes que sirven para establece buenas relaciones de convivencia con otras personas. Estas competencias se pueden dar a nivel psicoemocional o bien con guardar una relación directa con la forma en que interactuamos con los otros, ya sea en torno a la comunicación, la empatía o la facilidad de trabajar en equipo.

Como puedes imaginar, estas habilidades son de primera importancia para poder colaborar en una empresa, por lo que son valoradas en los procesos de selección y reclutamiento. Una ventaja es que todos poseemos en algún grado estas habilidades interpersonales, aunque hay personas que tienen mayores aptitudes para las relaciones sociales.

Ejecutivas

Por su parte, las habilidades blandas ejecutivas son aquellas que, como su nombre lo indica, sirven para ejecutar acciones concretas con el fin de realizar una actividad específica. Estas son prácticas y ayudan a la resolución efectiva de problemas que no necesariamente requieren de habilidades interpersonales. 

Por su papel en la ejecución de tareas, estas habilidades también son de primera importancia en el plano empresarial y pueden variar desde la capacidad para comunicar ideas hasta la resolución de tareas manuales o de problemas matemáticos y financieros. 

Reflexivas

Las habilidades blandas reflexivas, por el contrario, son aquellas que no sirven tanto para ejecutar tareas, sino que su principal función es llevar a cabo ejercicios de reflexión que se dan en el nivel de pensamiento. Esto significa que con estas habilidades las personas pueden encontrar soluciones a distintos problemas, ya sea de forma creativa, analítica o crítica. 

Estas habilidades son útiles si lo que buscamos es personal que actúe de forma premeditada y coherente. Es algo prioritario en los proyectos creativos, en el estudio de mercados y en la construcción de planes de negocios. 

Actitudinales

Un tercer tipo de habilidades blandas no interpersonales son aquellas que no tienen tanto que ver con la capacidad de hacer cosas o de procesar datos, sino con la actitud que una persona tiene de forma natural respecto a ciertos estímulos.

Algunas de estas guardan relación con la inteligencia emocional, mientras que otras tienen que ver con la capacidad que poseen las personas para afrontar retos de forma coherente, lógica e integral. 

Organizacionales

Como complemento a todas las habilidades blandas anteriores, podemos hablar también de las aptitudes organizacionales. Estas habilidades son de las más importantes para la vida empresarial y, en general, son las que poseen los jefes de un grupo de trabajo, pues son las que permiten la buena ejecución de tareas colectivas. 

Estas sueñen ir de la mano con las relaciones interpersonales, pero no son lo mismo en tanto que la organización se puede dar en un nivel individual. 

1. Adaptabilidad 

Tipo de habilidad blanda: actitudinal.

Una de las habilidades blandas más buscadas por las empresas es la adaptabilidad, la cual significa ser flexible y capaz de cambiar para lograr el éxito. Esta cualidad es de gran importancia, pues muchos roles requieren del manejo de circunstancias inusuales donde no hay una guía establecida sobre cómo se debe reaccionar.

Por todo lo anterior, la adaptabilidad permite que un colaborador sepa cómo responder eficazmente. Esta habilidad blanda también se relaciona con la confianza que tenga la persona en sí misma sobre sus decisiones, por más difíciles que sean.

Ejemplos de aplicación de la adaptabilidad:

• Cuando una empresa hace un cambio de plataforma para la gestión de la información interna, debe existir adaptabilidad para que los empleados modifiquen sus hábitos y adopten nuevas competencias para trabajar con el nuevo sistema. 
• Durante 2020, cuando las empresas migraron a los formatos de trabajo remotos, quienes mejor lograron adaptarse fueron quienes mantuvieron un buen papel laboral o un desempeño empresarial progresivo. 

2. Pensamiento crítico 

Tipo de habilidad blanda: reflexiva.

El pensamiento crítico es la habilidad blanda que se relaciona con la capacidad de discrepar y formular propuestas más complejas en torno a un problema, con el fin de encontrar una mejor solución. Esta te permite analizar la información con la que cuentas, así sea mucha o poca, para tomar las decisiones o conclusiones óptimas en cada caso.  

Esta es una habilidad interpersonal muy importante en el desarrollo profesional y se aplica casi a cualquier tipo de trabajo. Favorece el análisis de información y la atención a detalles que permitan encontrar una solución adecuada a alguna situación. El pensamiento crítico brinda la oportunidad de resolver problemas y tomar decisiones bien sostenidas. Además, las personas con esta cualidad son buenas abordando problemas complejos.

Ejemplos de aplicación del pensamiento crítico:

• Cuando un experto de marketing cuestiona por qué una campaña funcionó o no, lo hizo con el fin de buscar mejoras en las estrategias. Aquí está poniendo en práctica su pensamiento crítico.
• Frente a una crisis financiera, es necesario contar con tomadores de decisiones que sean capaces de pensar de forma crítica la situación con el fin de tomar las decisiones menos riesgosas y más responsables con las finanzas de la organización.

3. Pensamiento creativo

Tipo de habilidad blanda: reflexiva.

A diferencia del pensamiento crítico, el pensamiento creativo está más centrado en la innovación y la capacidad de una persona para aportar nuevas ideas en su lugar de trabajo. No significa que sean opuestos; en realidad vendrían a ser complementarios. Esto puede ir desde tener otra perspectiva sobre un problema hasta dar una resolución, un nuevo resultado o algún enfoque a un método antes no probado.

Por ejemplo, si una empresa requiere del aporte de nuevas características para un producto, un colaborador con pensamiento creativo podría ver un lado que nadie más esté percibiendo y, con base en ello, aportar una idea novedosa que antes no se había explorado. Al pensamiento creativo también se le conoce como «Pensar fuera de la caja», lo que es ver más allá de lo obvio. Esta habilidad blanda también sirve cuando se trata de resolver problemas o enfrentar nuevos desafíos.

Ejemplos de aplicación del pensamiento creativo:

• Si quieres generar una campaña publicitaria única, es necesario poner en práctica el pensamiento creativo. Gracias a esta habilidad, puedes llegar a respuestas innovadoras y únicas con base en lo que ya se ha hecho en otros momentos o por parte de tu competencia. 
• El pensamiento creativo es muy común entre los emprendedores, quienes para tener éxito en el mercado tienen que ofrecer productos nuevos y que ponen en cuestionamiento los que ya están establecidos (piensa en el caso de Netflix o de Uber, que revolucionaron con un servicio único gracias al pensamiento creativo). 

4. Trabajo en equipo

Tipo de habilidad blanda: interpersonal.

Seguro en todas las ofertas laborales encontrarás que solicitan a una persona con habilidades para trabajar en equipo. Esta también es una habilidad blanda relevante, pues más allá de tu función, es vital que sepas colaborar con los demás y seas capaz de transmitir tus fortalezas e ideas con los miembros de tu equipo.

Contar con esta habilidad blanda es tener una buena comunicación y una actitud positiva y servicial para ayudar a aquellos que lo necesiten. Esto también puede ir por el lado contrario, cuando es necesario que tú seas el que escuche alguna retroalimentación. Aquellas personas que tienen esta cualidad demuestran más capacidad de liderazgo y colaboración, sin importar que su rol requiera de actividades individuales.

Ejemplos de aplicación del trabajo en equipo:

• Esta habilidad se da en el plano más cotidiano, cuando las personas tienen que ponerse de acuerdo para llegar a una meta dividiendo las tareas de forma inteligente y con base en las cualidades de cada miembro del equipo.
• Si, por ejemplo, te has retrasado en una entrega y uno de tus compañeros de trabajo decide apoyarte para que ambos terminen a tiempo, este miembro del equipo está haciendo uso de sus habilidades para trabajar en equipo. 

5. Resolución de problemas

Tipo de habilidad blanda: ejecutiva.

Esta habilidad blanda permite determinar por qué ocurre un problema y de qué manera se puede solucionar; todo ello de manera rápida, pero efectiva. Esta cualidad no solo deja entrever que un candidato sea bueno para encontrar alternativas, sino también que es autosuficiente y puede manejarse por sí mismo sin importar el desafío que tenga enfrente.

La particularidad de esta aptitud es que también puede convertirse en una habilidad dura conforme ganes más experiencia y conocimiento en tu lugar de trabajo, pues serás capaz de dominar situaciones más específicas, pero empleando las mismas destrezas que tienes.

Ejemplos de aplicación de la resolución de problemas:

• Esta habilidad es especialmente útil para los vendedores, que tienen que negociar con el cliente para fomentar la compra. Si un prospecto está por cancelar una compra, el vendedor puede aplicar su capacidad de resolución de problemas ofertándole un descuento especial. 
• En el plano productivo, la resolución de problemas es una habilidad esencial. En estos casos, los empleados deben poder responder a un fallo mecánico o a un defecto productivo. Esto solo es posible con una buena capacidad reactiva. 

6. Ética laboral 

Tipo de habilidad blanda: actitudinal.

La ética laboral se refiere a ser coherente con tus ideas y acciones, algo que las empresas valoran mucho de sus colaboradores. Esta habilidad es interpersonal, pues con el tiempo vas aprendiendo a apreciar y comprometerte con aquello importante para ti. Esta cualidad genera credibilidad, lo que hace que la organización a la que pertenezcas te brinde un voto de confianza, crea en tus decisiones y en lo que dices y haces.

Cuando alguien es ético en su lugar de trabajo también es menos conflictivo y muestra más compromiso con lo que hace. Alguien que se desenvuelve con sinceridad y valores siempre busca lo mejor para sí mismo, pero también para el bien común.

Ejemplos de aplicación de la ética laboral:

• Esta habilidad se hace presente cuando, por ejemplo, un empleado pone a la misión de la empresa como una de sus guías a la hora de contactar al cliente.
• La ética laboral también se concreta en actos que refuerzan la imagen de profesionalismo de un líder; por ejemplo, cuando delega responsabilidades de manera objetiva y sin sesgos de género o de edad. 

7. Liderazgo 

Tipo de habilidad blanda: organizacional.

El liderazgo es una de las habilidades blandas más buscadas por las empresas, pues permite conducir y acompañar a los equipos de trabajo hacia el éxito. Si bien no todos los colaboradores pueden desempeñarse como líderes de un grupo, todas las actividades laborales requieren ciertas iniciativas individuales para cumplir con los objetivos establecidos.

Un líder es una persona que sabe proponer ideas innovadoras y motiva a los demás para aprovechar sus habilidades; además, es alguien capaz de ver las destrezas de otra persona y mejorarlas para el bien de todos. Sin duda, ninguna empresa sería lo que es sin los líderes que toman la batuta de los colaboradores para llevarlos por el camino correcto, bajo una buena orientación.  

Ejemplos de aplicación del liderazgo:

• El ejemplo obvio de liderazgo es aquel en el que un jefe de departamento delega de forma adecuada las tareas para cumplir con un proyecto.
• Asimismo, el liderazgo como habilidad puede surgir cuando existe un proyecto en el que los miembros de un equipo tienen libertad de autoorganización. Cuando alguien toma el control para organizar al equipo, se hace patente el liderazgo. 

8. Gestión del tiempo

Tipo de habilidad blanda: organizacional.

Esta habilidad blanda busca confirmar un punto importante: los empleados que administran bien su tiempo son más productivos. Además, ahorran tiempo y dinero a la empresa y permiten aumentar los ingresos.

La gestión del tiempo también es reflejo de eficiencia y cumplimiento de plazos. Una persona con esta cualidad es experta en priorizar tareas, para darles mayor rapidez y eficacia a aquellas urgentes, y dejar para después las que no son tan esenciales. Esta una de las habilidades blandas con mayor demanda, pues ayuda a evaluar la capacidad que tiene alguien para administrar su tiempo y el de los demás (sobre todo si tiene personas a su cargo).  

Ejemplos de aplicación de la gestión del tiempo:

• En el plano individual, esta habilidad organizacional ocurre cuando alguien lleva un control preciso de sus actividades, ya sea programando alarmas para destinar tiempos precisos a cada tarea o con check lists que permitan llevar un mejor seguimiento de las actividades cumplidas. 
• Esta habilidad es esencial para el personal de logística, quienes tienen que poder dimensionar en el panorama general cómo cada acción altera los tiempos de entrega. Esto con el fin de asegurar que todos los servicios se cumplirán en tiempo. 

9. Pensamiento estratégico

Tipo de habilidad blanda: reflexiva.

El pensamiento estratégico es un conjunto de factores que favorecen esta cualidad, entre ellos la función de planeamiento y control, así como lo actitud de apertura mental, de reflexión y participación en la toma de decisiones.

Esta habilidad blanda es buscada por los reclutadores, sobre todo para aquellos roles donde se requiere una persona que pueda responder a las circunstancias cambiantes. Va muy de la mano con el liderazgo, pues fomenta la planeación y la comunicación, pero también la capacidad de enfrentarse a problemas de diferente índole, ver oportunidades y detectar amenazas.  

Ejemplos de aplicación del pensamiento estratégico:

• El pensamiento estratégico ocurre, por ejemplo, cuando una líder divide un proceso en pasos para poner primero las tareas que son simples, mientras que las más pesadas se dejan al final.
• Otro buen ejemplo es cuando un emprendedor decide adquirir una deuda para financiar su proyecto de negocios y lleva a cabo una planeación de pago a largo plazo, considerando los mejores y peores escenarios financieros a los que se puede enfrentar. 

10. Comunicación

Tipo de habilidad blanda: interpersonal.

La capacidad de comunicación es una de las habilidades blandas más apreciadas por los reclutadores, pues determinan el éxito de la interacción del colaborador con todos los que estén involucrados con la empresa: desde compañeros hasta clientes.

Las habilidades comunicativas son un conjunto de aptitudes básicas que permiten relacionarse con los demás de forma efectiva. Estas no solo se refieren a ser un buen orador, sino también a tener escucha activa, contacto visual, asertividad y encontrar diferentes perspectivas para hacer frente a los retos más difíciles.  

Ejemplos de aplicación de la comunicación:

• Por ejemplo, no puede haber un buen vendedor sin habilidades de comunicación; de lo contrario, no contaría con las cualidades necesarias para desarrollar una interacción y conexión eficaces con los clientes.
• La comunicación también es importante para los líderes de departamentos, que tienen que fungir como intermediadores entre la mesa directiva y los empleados. Esto es esencial para transmitir los objetivos a los niveles más bajos y para reportar resultados a los niveles superiores. 

11. Atención a los detalles

Tipo de habilidad blanda: actitudinal.

Esta habilidad blanda es la capacidad de percibir hasta el más mínimo elemento destacable dentro de grandes volúmenes de información. Esto permite procesar correctamente lo más relevante a alguna situación o propuesta.

Cuando un reclutador busca a un colaborador con atención al detalle significa que quiere encontrar una persona que sea capaz de analizar a profundidad cualquier cosa para detectar oportunidades o incluso amenazas o errores. De esta manera, la empresa puede estar libre de equivocaciones fatales o muy obvias.

Ejemplos de aplicación de la atención a los detalles:

• Esta habilidad es fundamental para el diseño de prototipos. En estos procesos lo más importante es asegurarse de que cada aspecto del producto final sea perfecto. Por ello, los gestores de desarrollo comercial deben contar con un ojo hábil para detectar errores o fallos.
• La atención al detalle también es fundamental en los departamentos legales, quienes tienen que cubrir cada aspecto de los contratos y de los acuerdos comerciales con el fin de que no haya lagunas o interpretaciones incorrectas de los documentos.

Como puedes ver, las habilidades blandas son todas aquellas que definen tu personalidad. Sin embargo, claro está, habrá muchas que también determinen tu forma de trabajar y la manera en que te desenvuelves en tu entorno profesional. 

Para darte cuenta con qué habilidades blandas cuentas solo es cuestión de que hagas un análisis de ti mismo y tengas presente aquellas capacidades que te hacen resaltar. Verás que este ejercicio hará que te des cuenta de que tienes más cualidades de las que habías considerado.